Difusores activos - nebulizador o humidificador

Los difusores activos son máquinas con batería o enchufe que permiten micronizar los aceites esenciales en micro-gotas y respirarlos de forma concentrada para un efecto inmediato. Por su tecnología en frío, que sea por efecto Venturi o por ultra-sonidos, preservan las moléculas activas que no resisten al calor.

Una difusión aromática, de 5 a 30 minutos, se utiliza para ayudar a subir las defensas naturales, descongestionar las vías respiratorias (alérgicos a los aceites esenciales o asmáticos, elegir la difusión pasiva), mejorar la calidad del sueño, recuperar su energía, meditar y enfocarse o quitar los malos olores.  Provee iones negativos en el ambiente, lo que inhibe el desarrollo de patógenos en el aire.

El nebulizador sin agua produce una "neblina" de esencias puras, de acción más rápida.

El humidificador con agua produce "vapor de agua fría", sin o con esencias diluidas con 5 hasta 20 gotas en el agua, para mejorar la calidad del aire y lubricar las mucosas devolviéndoles su función de barrera natural: nariz, ojos, piel. Imprescindible en zonas secas o en periodos de resfriados o alergias.

La humedad saludable debe estar entre un 40% y un 60%: contrólala con nuestro medidor, que además evalúa la calidad del aire interior (concentración de partículas).

Todos los difusores se deben limpiar cuidadosamente entre usos (ultra fácil: dejar actuar 5 minutos en el tanque 1 cuchara de vinagre blanco diluida en 2 cucharas de agua tibia y aclarar) para impedir el desarrollo de bacterias y evitar residuos.